Hemos aprendido a colaborar, a cooperar con nuestros compañeros, a convertir el grupo en nuestra familia, ya que hemos pasado más horas juntos que con nuestra familia. Se han dado situaciones que nos han hecho tirar la toalla, rendirnos y no continuar, pero gracias al apoyo de los iguales hemos conseguido convertir una idea en un sueño cumplido.
En mi opinión las discrepacias entre nosotros no han sido nunca un problema, lo he tomado como la diferencia que favorece al proyecto, el pilar del que se basa un buen trabajo.
Hoy terminan las exposiciones, todos hemos acabado contentos y orgullosos por el trabajo realizado y no es de extrañar. Creo que todo el esfuerzo realizado se ha demostrado y todos y cada uno de vosotros debéis de estar contentos. Me he sorprendido en varias exposiciones durante estos días, ideas que no se habrían pasado por mi cabeza y que me han dejado sin palabras. Os felicito gratamente.
Impresionante es lo único que puedo decir y daros las gracias por compartir vuestro trabajo y vuestras ideas.
Para acabar no puedo olvidarme hablar del maravilloso grupo que me abrió las puertas este año. No olvidaré a Julia con su habilidad especial para trasnochar y hacer que cambie el prezi a la 1.25 de la madrugada siendo habitual su "josefismo" (habilidad de una persona para ser borde), María con el ingenio de coordinación y unidad grupal, Lorena y su habilidad para permanecer inamovible en su sitio de libreros, Clara y sus agobios compartidos cuando no sabíamos como desarrollar el trabajo y siempre nos acababan echando un capote. Las risas, los agobios, las metodologías compartidas y todo los buenos y malos ratos que he compartido con vosotras no lo cambiaría por nada en el mundo.
